El majestuoso cerros Aconcagua domina la cordillera de los Andes, allá dode ésta es dividida por valles longitudinales como el de Uspallata, y aparece la antigua Precordillera que brinda hermosos parajes serranos en contacto con el piedemonte y sus cerrilladas, rampa que la comunica con sus planicies. Es la última donde se han desarrollado los Oasis: la planicie de la Travesía y la depresión de los Huarpes, desérticas y de gran extensión, interrumpidas sólo por las Huayquerías, que aparecen como serranías bajas erosionadas como laberintos. Hacia el sur, también surgen el antiguo bloque de montaña: San Rafael">San Rafael y la Payunia volcánica, con sus conos, sus mesetas y coladas de lava. Estudios geológicos sitúan la elevación del cerro Aconcagua en la era permotriásica, unos 200 a 280 millones de años atrás. El conjunto montañoso se formó por la subducción de la placa de Nazca bajo la placa Suramericana durante la geológicamente reciente orogenia andina.
El Aconcagua se encuentra por completo dentro de la República Argentina, concretamente en la provincia de Mendoza, departamento de Las Heras. No constituye limite internacional y está comprendido dentro del parque provincial Aconcagua. Limita al oeste y suroeste con el valle de Los Horcones inferior, mientras que por el este y norte limita con el valle de las Vacas. En los alrededores del cerro Aconcagua se elevan varias cumbres que superan los 5.000 m sobre el nivel del mar. En el valle de Los Horcones superior se alza el cerro Cuerno (5.450 m), el Catedral (5.200 m), el Bonete (5.100 m) y el cerro de los Dedos (5.000 m), entre otros. En el valle de Los Horcones inferior se encuentra el cerro Mirador (5.800 m), el Ibaóes (5.200 m) y el Almacenes (4.800 m). Por último, en el valle de las Vacas se elevan, entre otros, el cerro Ameghino (5.800 m), el Fitz Gerald (5.300 m), el Santa MarÌa (5.100 m) y todos los cerros que forman el cordón de los Penitentes.