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  • Montañas más altas | Listados y clasificaciones

    En esta sección de Montipedia dispones de diversos índices, listados, catálogos o clasificaciones en las que se recogen y se presentan las montañas o unidades de relieve según su altura, su ubicación geográfica o por países, entre otros criterios.

    La medición de la altura de una montaña para su clasificación

    La altimetría es la parte de la topografía que tiene por objeto la medición de alturas y su representación sobre un mapa. La altura o altitud de un lugar cualquiera sobre la Tierra se mide en relación con el nivel del mar. De esta forma, la topografía, a través de un conjunto de técnicas de medición y operaciones geométricas, tiene por finalidad determinar la forma y las dimensiones de un territorio para representarlo gráficamente.

    Una buena parte del trabajo topográfico suele realizarse in situ, el trabajo de campo, cuyas tareas básicas son las de situación, a partir de algunos puntos fundamentales del terreno ya determinados previamente mediante trabajos geodésicos, y las de medición de ángulos y distancias. Los aparatos clásicos de la topografía determinan direccciones y alineaciones mediante visuales, con la ayuda de alidadas de puntería instaladas sobre círculos graduados y equipadas de plomadas y niveles de burbuja. En la medición de distancias se suele diferenciar entre los métodos directos y los indirectos o estadimétricos. Los primeros, en contacto con el terreno, utilizan podómetros, reglones graduados, ruedas y cadenas de agrimensor y cintas métricas. Los métodos estadimétricos se basan en las leyes geométricas de la perspectiva y requieren alidadas especiales, modernamente de anteojo, con marcas o «hilos» horizontales para la lectura de las miras. Con la ayuda de estos aparatos, el topógrafo determina un conjunto de puntos, en los que el ayudante sitúa la mira, a partir de estaciones en las que se instala el aparato topográfico sobre un trípode.

    La electrónica y la informática han hecho evolucionar notablemente la tecnología topográfica con numerosas aportaciones, como las libretas de campo digitales para la anotación de los datos y, sobre todo, los distanciómetros, aparatos automáticos de medición de distancias. También, en los últimos años, los aparatos electrónicos de posicionamiento global (GPS) han supuesto un avance definitivo al facilitar la localización precisa de puntos, a partir de triangulaciones apoyadas en satélites artificiales destinados a este uso específico.

    No obstante, y a pesar del espectacular y continuado refinamiento de las técnicas topográficas, la mayor revolución en el cartografiado del territorio se ha producido gracias a los métodos de alto rendimiento de la fotogrametría, a partir de fotografias aéreas tomadas en determinadas condiciones.